miércoles, 5 de agosto de 2015

EL MIEDO

GNOSIS
EL MIEDO
LA BÚQUEDA DE SEGURIDAD
Por: samael aun weor

Cuando los polluelos tienen miedo se esconden debajo de las alas amorosas de la gallina en busca de seguridad.
                                               
El niño asustado corre en busca de su madre porque junto a ella se cree seguro.

Está pues demostrado que el miedo y la búsqueda de seguridad se encuentran siempre íntimamente asociados.
                                    
El hombre que teme verse asaltado por bandidos busca seguridad en su pistola.

El país que teme verse atacado por otro país, comprará cañones, aviones, buques de guerra y armará ejércitos y se pondrá en pie de guerra.

Muchos sujetos que no saben trabajar, aterrorizados ante la miseria buscan seguridad en el delito, y se vuelven ladrones, asaltantes, etc...

Muchas mujeres faltas de inteligencia asustadas ante la posibilidad de la miseria se convierten en prostitutas.

El hombre celoso teme perder a su mujer y busca seguridad en la pistola, mata y después es claro que va a parar a la cárcel.

La mujer celosa mata a su rival o a su marido y así se convierte en asesina.

Ella teme perder a su marido y queriendo asegurárselo mata a la otra o se resuelve asesinarlo.

El casero miedoso de que la gente no le pague el alquiler de la casa, exige contratos, fiadores, depósitos, etc., queriendo así asegurarse y si una viuda pobre y llena de hijos no puede llenar tan tremendos requisitos, y si todos los caseros de una ciudad hacen lo mismo, al fin la infeliz tendrá que irse a dormir con sus hijos a la calle o en los parques de la ciudad.

Todas las guerras tienen su origen en el miedo.

Las gestapos, las torturas, los campos de concentración, las siberias, las espantosas cárceles, destierros, trabajos forzados, fusilamientos, etc. tienen origen en el miedo.

Las naciones atacan a otras naciones por miedo; buscan seguridad en la violencia, creen que matando, invadiendo, etc. podrán hacerse seguras, fuertes, poderosas.

En las oficinas de policía secreta, contra-espionaje, etc. tanto en el este como en el oeste, se tortura a los espías, se teme de ellos, quieren hacerles confesar con el propósito de hallar seguridad para el Estado.

Todos los delitos, todas las guerras, todos los crímenes, tienen su origen en el miedo y en la búsqueda de seguridad.

En otros tiempos había sinceridad entre las gentes, hoy el miedo y la búsqueda de seguridad han acabado con la fragancia maravillosa de la sinceridad.

El amigo desconfía del amigo, teme que éste le robe, le estafe, le explote y hasta hay máximas estúpidas y perversas como esta: "nunca deis la espalda a tu mejor amigo". Los hitlerianos decían que esta máxima era de oro.

Ya el amigo teme al amigo y hasta usa máximas para protegerse.

Ya no hay sinceridad entre los amigos.

El miedo y la búsqueda de seguridad acabaron con la deliciosa fragancia de la sinceridad.

Castro Ruz en Cuba ha fusilado a millares de ciudadanos temeroso de que lo acaben; Castro busca seguridad fusilando. Cree que así puede encontrar Seguridad.

Stalin, el perverso y sanguinario Stalin, apestó a Rusia con sus sangrientas purgas.

Esa era la forma de buscar su seguridad.

Hitler organizó la Gestapo, la terrible Gestapo, para seguridad del Estado.

No cabe duda de que temía que le derrocaran y por ello fundó la sangrienta Gestapo.

Todas las amarguras de este mundo tienen su origen en el miedo y la búsqueda de seguridad.

Los maestros y maestras de escuela deben enseñarle a los alumnos y alumnas la virtud del valor.

Es lamentable que a los niños y niñas se les llene de temor desde su mismo hogar.

A los niños y niñas se les amenaza, se les intimida, se les atemoriza, se les da de palos, etc.

Es costumbre de padres de familia y maestros, atemorizar al niño y al joven con el propósito de que estudie.

Por lo común se les dice a niños y jóvenes que si no estudian tendrán que pedir limosna, vagar hambrientos por las calles, ejercer trabajos muy humildes como limpiar calzado, cargar fardos, vender periódicos, trabajar en el arado, etc. etc. etc. (Como si el trabajo fuese delito).

En el fondo, tras de todas estas palabras de padres y maestros, existe miedo por el hijo y búsqueda de seguridad para el hijo.

Lo grave de todo esto que estamos diciendo, es que el niño y el joven se acomplejan, se llenan de temor y más tarde en la vida práctica son sujetos llenos de miedo.

Los padres de familia y maestros que tienen el mal gusto de asustar a los niños y niñas, a los jóvenes y señoritas, en forma inconsciente los están encaminando por el camino del delito, pues como ya dijimos, todo delito tiene su origen en el miedo y la búsqueda de seguridad.

Hoy en día el miedo y la búsqueda de seguridad han convertido al planeta tierra en un espantoso infierno. Todo el mundo teme. Todo el mundo quiere seguridades.

En otros tiempos se podía viajar libremente, ahora las fronteras están llenas de guardias armados, se exigen pasaportes y certificados de toda especie para tener derecho a pasar de un país a otro.

Todo esto es el resultado del miedo y búsqueda de seguridad.

Se teme al que viaja, se teme al que llega y se busca seguridad en pasaportes y papeles de toda especie.

Los maestros y maestras de escuela, colegios, universidades deben comprender el horror de todo esto y cooperar para el bien del mundo, sabiendo educar a las nuevas generaciones, enseñándoles el camino del valor auténtico.

Es urgente enseñarle a las nuevas generaciones a no temer y a no buscar seguridades en nada ni en nadie.
                                      
Es indispensable que todo individuo aprenda a confiar más en sí mismo.

El miedo y la búsqueda de seguridad son terribles debilidades que convirtieron la vida en un espantoso infierno.

Por doquiera abundan los cobardes, los miedosos, los débiles que andan siempre en busca de seguridad.

Se teme a la vida, se teme a la muerte, se teme al qué dirán, "al dice que se dice", a perder la posición social, la posición política, el prestigio, el dinero, la bonita casa, la bonita mujer, el buen marido, el empleo, el negocio, el monopolio, los muebles, el carro, etc. etc. etc. a todo se teme, abundan por todas partes los cobardes, los miedosos, los débiles, más, nadie se cree a sí mismo cobarde, todos presumen de fuertes, valerosos, etc.

En todas las clases sociales existen millares y millones de intereses que se teme perder y por ello todo el mundo busca seguridades que a fuerza de hacerse cada vez más y más complejas, hacen de hecho la vida cada vez más complicada, cada vez más difícil, cada vez más amarga, cruel y despiadada.

Todas las murmuraciones, todas las calumnias, intrigas, etc., tienen su origen en el miedo y búsqueda de seguridad.

Para no perder la fortuna, la posición, el poder, el prestigio, se propagan calumnias, chismes, se asesina, se paga para que se asesine en secreto, etc.

Los poderosos de la tierra se dan hasta el lujo de tener asesinos a sueldo y muy bien pagados, con el propósito asqueante de eliminar a todo aquel que amenace eclipsarles.

Ellos aman el poder por el poder mismo y se lo aseguran a base de dinero y mucha sangre.

Los periódicos constantemente están dando noticias de muchos casos de suicidio.

Muchos creen que el que se suicida es valeroso pero realmente quien se suicida es un cobarde que le tiene miedo a la vida y que busca seguridad en los brazos descarnados de la muerte.

Algunos héroes de guerra fueron conocidos como personas débiles y cobardes, más cuando se vieron cara a cara con la muerte, su terror fue tan espantoso, que se tornaron en terribles fieras buscando seguridad para su vida, haciendo un esfuerzo supremo contra la muerte. Entonces se les declaró héroes.

El miedo suele confundirse con el valor.

Quien se suicida parece muy valeroso, quien carga pistola parece muy valeroso, mas en realidad los suicidas y los pistoleros son muy cobardes.

Quien no le tiene miedo a la vida no se suicida.

Quien no tiene miedo a nadie no carga pistola al cinto.

Es urgente que los maestros y maestras de escuela le enseñen al ciudadano en forma clara y precisa, lo que es valor de verdad y lo que es miedo.

El miedo y la búsqueda de seguridad han convertido el mundo en un espantoso infierno.


samael aun weor

viernes, 30 de enero de 2015

SENTIRSE INSULTADO

SENTIRSE INSULTADO


Cuando siente que alguien no se ha comportado bien con usted, siente que no han estimado su valor.

Por ejemplo, sentirse insultado es sentir que no estiman su valor.

Así una persona suele decir a menudo cuando la in­sultan:

"¿Por quién me toma usted?", o alguna cosa parecida.

Esto signi­fica que una persona posee cierta valoración de sí misma, por eso dice:

"¿Por quién me toma usted?", queriendo decir que si la otra persona lo supiera no se atrevería a comportarse como lo hace.

Desde luego, si no se ha forja­do la imagen de sí mismo de poseer mucho valor, no le harán perder fácil­mente los estribos.

Si tiene una alta opinión de sí, es natural que le sea más fácil sentir que los otros no estiman su valor.

Así le será más fácil con­siderar internamente.

Hasta se da el caso que una persona se preocupe tanto por la idea del trato que le dan los otros o por sospechar que se burlan de ella que se pasa toda la vida haciendo consideraciones internas.

O asimismo, algunas personas se creen superiores a las otras a causa de sus sufrimientos.

Se apegan a sus sufrimientos y llegan a considerarse merecedoras de una valoración especial porque padecen toda clase de penurias, miserias y sufri­mientos.

Se ofenden si otra persona habla de sus propios sufrimientos.

Sien­ten que la otra persona no les muestra bastante consideración y así dan prueba de egoísmo.

Les cuesta entender que los otros tienen también sus sufrimientos.

Tampoco entienden que ver el egoísmo en los otros es ver el reflejo del propio egoísmo, porque cuanto más se exige de los otros, más egoís­tas nos parecen.

¿Qué es lo que causa la consideración interna?

Planteemos la cuestión:

"¿En qué punto o cuándo empieza a hacer cargos?"

Empieza a hacerlos cuando siente que no lo estiman, cuando se siente menospreciado.

El mozo no viene cuando lo llama.

El empleado del negocio sirve primero a otra per­sona.

La gente no se fija en usted en la calle o, digamos, no le presta la suficiente atención.

O una persona persiste en ignorarlo; o tal vez oye lo que alguien dice de usted: esto es casi siempre desagradable.

Hay mil y un ejemplos posibles, más o menos de peso.

Los incidentes nimios suelen moles­tarnos —el mozo, el empleado del negocio—.

Estos dan lugar a pequeños cargos y suelen convertirse en hábitos.

Pero poseemos toda suerte de cargos de muy antigua data contra los otros, algunos almacenados en el pasado, infortunadamente.

Todos tienen su origen en la misteriosa cuestión de la propia valoración de sí.

Una persona, que se ha observado a sí misma, suele exclamar:

"¿Qué es esa cosa en mí que se ofende en este momento y que ya ha empezado a hacer cargos?

Mire, puedo observarla cómo obra en mí recogiendo materiales y recordando cosas desagradables y buscando palabras y frases para usarlas contra la otra persona para que ésta se sienta subestimada —de hecho, para que comprenda que es un desecho—.

¿Es acaso una ima­gen de mí mismo?

¿Es el 'yo' imaginario o “yo” fantasía?

¿Es la falsa personalidad?

¿O en qué se fundamenta todo esto?"

Respondemos que todo esto se funda­menta en el identificarse consigo mismo.

Todas las formas de consideración interna, de las cuales una de ellas es hacer cargos contra otra persona, perte­necen al identificarse.

El Trabajo nos dice de estudiar la identificación hasta sus raíces mismas.

El hombre se ofende únicamente cuando se identifica con­sigo mismo.

Y el Trabajo dice asimismo que un estudio de la identificación debe comenzar con el estudio cuando está usted identificado consigo mismo.

Es allí donde se puede perturbarlo, herirlo, ofenderlo, insultarlo, etc.

El estar identificado consigo mismo viene primero, el perturbarse y ofenderse segun­do, el hacer cargos internos tercero.

Maurice Nicoll





martes, 27 de enero de 2015

LA MENTIRA ACERCA DE SI

LA MENTIRA ACERCA DE SI

“¿CUÁL ES EL PRINCIPAL OBSTÁCULO EN EL DEARROLLO DE LA CONSCIENCIA?”

“Hay un claro obstáculo, una razón clara de porqué no podemos tener la consciencia como somos.

Este principal obstáculo en el camino del desarrollo de la consciencia es la mentira.

No sabemos lo que significa mentir porque jamás estudiamos esta cuestión seriamente.

Empero, la psicología de la mentira es realmente la parte más importante del estudio del ser humano.

Si el hombre pudiese describirse como un tipo zoológico, se lo describiría como un animal mentiroso.

Desecharé toda mentira externa y tomaré sólo la mentira del hombre para consigo mismo acerca de sí.

Esta es la razón de por qué nos hallamos en el estado en que ahora estamos, y por qué no llegamos a un estado de la consciencia mejor, superior, más poderoso y más efectivo.

Según el sistema que estamos estudiando ahora no podemos conocer la verdad porque la verdad sólo puede alcanzarse en la consciencia objetiva.

De modo que no podemos definir qué es la verdad; pero si la encaramos como que la mentira es lo opuesto a la verdad, podemos definir la mentira.

La mentira más grave es cuando sabemos perfectamente bien que no conocemos ni podemos conocer la verdad acerca de las cosas y sin embargo, jamás actuamos de conformidad.

Pensamos y actuamos siempre como si conociéramos la verdad.

ESTO ES MENTIR.

CUANDO SÉ QUE NO CONOZCO ALGO Y AL MISMO TIEMPO DIGO QUE CONOZCO Y ACTÚO COMO SI LO CONOCIESE, ESO ES MENTIR.

Por ejemplo, no sabemos nada sobre nosotros mismos y realmente sabemos que no sabemos nada y sin embargo jamás reconocemos o admitimos el hecho; nunca lo confesamos siquiera a nosotros mismos; actuamos, pensamos y hablamos como si supiéramos quiénes somos.

Este es el origen, el comienzo de la mentira.

Cuando entendemos esto y seguimos esta línea, y cuando tratamos de conectar esta idea con todo lo que pensamos, con todo lo que decimos, con todo lo que hacemos, empezamos a eliminar los obstáculos que yacen en el camino hacia la consciencia.

Pero la psicología de la mentira es mucho más difícil de lo que pensamos, porque hay muchas clases diferentes de mentira y muchas formas sutilísimas, difíciles de descubrir en nosotros mismos.

En los otros, las vemos comparativamente con facilidad, pero no en nosotros mismos”.

Ouspensky


domingo, 25 de enero de 2015

ENVIDIA

ENVIDIA
Por: Maurice Nicoll

Hablaremos hoy de las diferentes clases de emociones negativas.

Se ha dicho varias veces que el objeto del Trabajo es despertar el Centro Emocional.

También se ha dicho que, debido a que el Centro Emocional no trabaja propiamente, no nos da verdaderas emociones.

Está sobrecargado por haber imitado las emociones negativas de los otros y por las que surgen de la Falsa Personalidad.

El Sr. Ouspensky dijo hace algunos años:

"No conocemos las verdaderas emociones.

Nuestro Centro Emocional está alimentado con papel moneda, novelas, filmes, etc.".

Debido en especial al trabajo realizado por Ouspensky en conexión con la enseñanza recibida de Gurdjeff, se le dio tanta importancia al estudio de la parte negativa del Centro Emocional.

En otras palabras, debido al trabajo que efectuó sobre esta parte del sistema, el estudio de las emociones negativas paso a ocupar un lugar de privilegio.

Ahora bien, Gurdjeff enseñó que la maquina humana es capaz de realizar grandes experiencias, mucho más allá de las que conocemos corrientemente.

Si todos los centros estuvieran despiertos y realizaran un trabajo correcto, de cierto no nos reconoceríamos.

Tal como somos, llevamos una vida endeble y carente de sentido día tras día, porque nuestro aparato para la vida está en tan mal estado.

Ouspensky hizo hincapié sobre el hecho que esta situación se debía al mal estado de nuestro Centro Emocional.

Esta anegado por diversas clases de emociones negativas.

Por esta razón interesa escoger de la antigua literatura esotérica algunas de las cosas que fueron escritas acerca de las emociones negativas y descubrir qué emociones negativas fueron especialmente mencionadas por la necesidad de trabajar contra ellas, de modo que el Centro Emocional pudiera ser purificado.

Es preciso comprender ante todo que la purificación del Centro Emocional tiene que ver con las Emociones Negativas.

No hay que mezclar la idea de la pureza del Centro Emocional con la pureza tal como se la entiende en el sentido moral.

La gente cree que las emociones impuras siempre se refieren a los pensamientos sexuales y que las emociones puras consisten en nunca tener esos pensamientos.

Ahora bien, antes de citar algunos párrafos de Ouspensky diré que una de las emociones más impuras es LA ENVIDIA.

Volveremos en breve a este punto.

El Sr. Ouspensky dice (en Tertiun Organum):

"Existe una división da la emoción en pura e impura.

Todos los sabemos, todos empleamos esas palabras, pero no comprendemos gran cosa de lo que significan.

En rigor, ¿qué significan 'puro' o 'impuro' con referencia al sentimiento? ...

Solo el análisis de las emociones desde el punto de vista del conocimiento puede darnos una clave de ello...

Las emociones impuras nos dan un conocimiento OSCURO, no puro, así como un cristal impuro nos da una imagen confusa.

La emoción pura da una imagen CLARA, pura de aquello para cuyo conocimiento se la destinó.

Esta es la única decisión posible de la cuestión.

Llegar a esa conclusión nos salva del común error de los moralistas que dividen arbitrariamente todas las emociones en 'morales' e 'inmorales'.

Pero si intentamos un instante separar las emociones de sus acostumbrados marcos morales, vemos entonces que la cuestión es considerablemente más sencilla, que las emociones no son puras por su naturaleza, ni tampoco que son impuras por su naturaleza, sino que cada emoción será pura o impura segun se le incorpore o no otras emociones.

Puede haber una SENSUALIDAD PURA, la sensualidad del Cantar de los Cantares, que nos inicia en la sensación de la vida cósmica y nos da el poder de oír latir el pulso de la naturaleza.

Y puede haber una sensualidad impura mezclada con otras emociones malas o buenas desde un punto de vista moral pero que convierten igualmente en fango el sentimiento fundamental.

Puede haber SIMPATÍA PURA, y puede haber simpatía mezclada con cálculo para recibir algo en cambio de nuestra simpatía.

Puede haber puro amor al conocimiento, sed de conocimiento en la que las consideraciones de utilidad o de provecho asumen la principal importancia".

Todas las emociones negativas son impuras en el sentido del Trabajo.

Deforman.

Todos nosotros deberíamos saber ya lo que significa llegar a ser negativo.

Se lo conoce por el sabor interior.

De repente uno se siente por completo diferente.

¿Por qué se siente uno de súbito por completo diferente?

Me refiero desde luego a aquellos que gozan de alguna observación de si interna.

Tales personas saben que les ha sucedido algo dentro de sí.

¿Qué les ha sucedido?

De pronto se han vuelto negativas.

Hemos hablado recientemente sobre este particular, creo que en el último comentario, refiriéndonos a un hombre que se levanta de la mesa por haber sido llamado por teléfono y vuelve a sentarse completamente cambiado.

Lo importante es que basta un pensamiento desagradable al que se le permite tener poder sobre uno puede hacer que en las más placenteras circunstancias se vuelva uno negativo por haberse identificado con dicho pensamiento.

Todo, por así decir, cae en uno.

Ahora bien, si una persona esta tan indefensa interiormente pese al amparo del Trabajo, si es a tal punto una función de vida, si toda mi vida interior depende de los sucesos externos y del modo en que es tratada por la gente, entonces en verdad dicha persona carece de individualidad.

Nada tiene en sí misma que pueda mantenerla apartada de la vida externa y de la forma en que esta se comporta hacia ella —nada tiene en ella con lo cual resistir a la vida.

Ahora bien, si tuviera en ella al Yo Real —esto es, si llegara a ser consciente, y el Yo Real fuera el Amo en ella— lo que sucede en la vida externa poco podría afectarla, porque tendría en sí misma su centro de gravedad.

Sabemos que cuando somos negativos vemos todo de una cierta manera, desde cierto ángulo, digamos, como dominados por EL RECELO.

Sabemos que nos ata como un hechizo, que no podemos creer lo que recordamos vagamente haber creído poco antes, como si todo hubiera sufrido de pronto una inversión.

Esta brujería, este poder que ata como un hechizo y pertenece a las emociones negativas, no puede ser detenido al instante.

Es preciso empezar con las emociones negativas más ligeras y separarse de ellas —NO DEJARSE LLEVAR POR ELLAS.

Puesto que en nosotros mismos no tenemos un verdadero centro de gravedad y puesto que nuestra denominada vida consciente es una manifestación del desplazamiento de diferentes "Yoes", hemos de comprender hasta qué punto es preciso mantenerse despierto para poder trabajar sobre el Centro Emocional, EN ESPECIAL CUANDO SE TIENE ALGÚN PLACER EN SER NEGATIVO.

Si se pudiera eliminar todas las emociones negativas de la mayoría de la gente, no les quedaría fuente alguna de “felicidad”

El Trabajo dice que debemos renunciar al sufrimiento inútil —esto es, nuestras emociones negativas.

¿Y ha renunciado usted a toda huella de ellas?

Las emociones negativas son causa de nuestro sufrimiento y con todo las gozamos.

Ahora bien, hacer una lista de las emociones negativas nos ayuda a observarlas.

Es lo que hay que hacer.

Mencionare tan solo unas pocas.

Mencionare LA ENVIDIA.

Interesa tratar de definir que es la Envidia.

Jenofonte, hablando de Sócrates, dijo que "considerando lo que es la Envidia, decidió que era algún desasosiego, no como el que surge por el mal éxito de los amigos, ni tampoco el que se siente por el buen éxito de los enemigos, pero solo dijo que eran envidiosos los que se sentían FASTIDIADOS POR EL BUEN ÉXITO DE SUS AMIGOS".

Recordaran que hemos citado recientemente el parecer de Píndaro sobre la Envidia, phthónos, "la peor de todas las bajezas que deforman al Hombre", siendo el deseo de despreciar la excelencia la parte más mezquina de su naturaleza.

Bacón, en su Historia Natural dice:

"La Envidia emite algún espíritu maligno y ponzoñoso que se apodera del espíritu de otro y es asimismo de mayor fuerza cuando la hechura del ojo es oblicua", lo cual está de acuerdo con lo que dice el Eclesiástico: "El hombre envidioso tiene el ojo malvado (XIV. 8-10). (Es interesante destacar que el origen latino de la palabra, "envidia", significa literalmente "una mirada de mala voluntad".)

Pablo habla de otras emociones negativas, tal como las enemistades, las peleas, los celos, la ira, etc., pero la impetración final a los Gálatas es:

"No nos hagamos vanagloriosos, irritándonos una a otros, envidiándonos unos a otros", (Y. 26).

Asimismo, en el Antiguo Testamento, en Proverbios, el mayor poder es atribuido a la envidia:

"Cruel es la ira, e impetuoso el furor; más ¿quién podrá sostenerse delante de la envidia?",
(XXVII.4.5)


Maurice Nicoll

DEBEMOS MODIFICAR LOS HABITOS

DEBEMOS MODIFICAR LOS HÁBITOS
Por: samael aun weor

Desgraciadamente vivimos diariamente una vida mecanicista, rutinaria, absurda. Repetimos sucesos, nuestros hábitos son los mismos, nunca hemos querido modificarlos, son el carril mecánico por donde circula el tren de nuestra miserable existencia, empero, pensamos de nosotros lo mejor...

Lo curioso del caso es que jamás se nos ocurre modificar los hábitos, parece que no nos cansamos de estar repitiendo siempre lo mismo.

Los hábitos nos tienen petrificados, más pensamos que somos libres; somos espantosamente feos pero nos creemos Apolos...

Somos gente mecánica, motivo más que suficiente como para carecer de todo sentimiento verdadero de lo que se está haciendo en la vida.

Samael Aun Weor